1/02/2007

Cunca, la Atenas de Ecuador

O eso decía en un afiche que vimos.
Guayaquil fue lo último que quisimos saber de calor, sed permanente, piel pegajosa y cucarachas grandes. Somos gente de las montañas y decidimos buscar climas más fríos. Viajamos a las 4.30 y vimos el atardecer más largo de nuestras vidas. El bus recorre todo el llano hasta la sierra ye empieza a subir por el parque natural... mmmm, no, me olvidé el nombre. Bueno, pero la carretera lo atraviesa y durante un largoi trayecto solo se ve bosque,. helechos y ninguna casa. Y cuandoi va bien arriba uno descubre que ha subido un montón, pero no hay montañas que cubran la vista a la llanura, y se ve tooodo el valle a lo lejos durante un trayecto de unos 10 o 15 minutos. Justo hacia el occidente, hacia donde se oculta el sol. Entonces vimos el atardecer allá a lo lejos (a las 7.15 todavía se veía un nubarrón rojo allá a lo lejos), y las ciudades con las luces ya encendidas.
Llegamos a Cuenca hacia las 9pm, sin un contacto fijo ni mapa de la ciudad. Adoramos el frío apenas lo sentimos y comimos, adivinen qué? carne! cerca del terminal. Después de averiguar precios en unos hostales con cara de motel, tomamos la determinación de qudarnos en el terminal, que se veía amable. Parece que es costumbre local, pero varias personas pasaron allí la noche. Nosotros, ni cortos ni pererzosos sacamos los sleepings y nos acomodamos en una esquina. El aislamiento térmico de esas cosas es bestial. En algún punto yo me desperté bañada en sudor y tuve que quitarme el saco. Muy a las 5.50am nos despertó el guardia y salimos con un mapa que nos facilitó un chileno en el terminal, hacia el centro histórico.
Plantamos nuestro puestico en 3 lugares diferentes de los cuales nos echaron hasta que nos dejaron hacer en unas escalinatas donde había otros 4 parchando como nosotros. Claro, ellos veteranos y nosotros novatos. De los 4 solo uno es conversable.
Y esta es la historia hasta ahora, mientras yo escribo esto, Andrés cuida el puestico y talla un báculo de madera. Pero nos ha ido mejor que nunca: hoy vendimos 4 dólares. Jajajajaja.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicitaciones grandes. Bajaron bandera!!!! Eso es maravilloso. No importa la cantidad, igual los del Exito vendieron el equivalente hace mas de 25 años y miren hasta donde llegaron. Caros los relojes, pues uno que cueste 2 dólares para media hora, equivale a un montón de plata en tres años que es mas o menos el promedio que dura una pila en los relojes convencionales. Consejo para Andrés: Deben utilizarse herramientas mas adecuadas. Entendemos que no pueden andar con un taller en las espaldas, pero los dientes no se hicieron para cortar varillas. No importa, a mí se me desportillaron los dientes apenas con 9 años, y no fué precisamente disfrutando de la vida. Sigan adelante y prepárense para el incremento en ventas. Ojalá no los agarren en el departamento de impuestos porque han excedido los topes.

Otro abrazote,